Todo pasará.
Este vacío del corazón
esta tuberculosis del alma
esta orfandad de fe
Mi autocrítica que no da fruto
la atención que no mereces
y este estado de perpetua
desorientación.
Detrás de mi
queda música
y nuestros cuerpos que
exploramos con maestría.
Geografía memorizada
el tacto preciso y placentero.
Mi mejor amigo
mi feroz enemigo
escapo siempre de ti
para volver al fin
cansada y humillada a
tus brazos, que son ramas
desnudas y oblicuas
rígidas de desengaños
cargadas de savia orgasmada.
Deberían castigarme por
díscola y me desnudaría para
recibir los azotes, obediente
sumisa y arrodillada
El continuo ir y venir
el mantra eterno del quiero
lo que no tengo y la certeza
de un inminente fracaso.
Necesito que pase el tiempo y te
aleje, desdibujado y tenue
desteñirte al fin de mi memoria.
Que el viento sea el vestigio de
un jamás premonitorio e inteligente
Todo pasará
Y probablemente nunca vuelvas a
encontrar una rendija abierta para
colarte en el tablero de este juego
que nunca llegó a ser divertido...
No hay comentarios:
Publicar un comentario