OCASO

 

Ya se notan las horas
El sol se retira con premura
Los pájaros vuelan rasantes
Y la noche cae ya a plomo

Suspiro profundo para liberarme
Mis pies descalzos pisan la hierba
Tengo corazón de árbol y alma de acero
Sigo buscando la prosa perfecta pero

Se me escapa como los días de la vida
Sigo hipnotizada las líneas de la carretera
El túnel es un ventrículo central del monte
Los maquis caminaron estos montes antaño
Y la vida es un episodio perpetuo que se repite en bucle.

No me tomes en serio ni te tomes tú
Somos un beso de mariposa que surge en medio de
Una galaxia caótica y perfecta.
De haberlo sabido antes, muchas lágrimas
No habrían caído de mis ojos

Escribo para sobrevivir, para calibrar
Ya no busco quimeras ni me alisto en ejércitos
Para librar batallas.
Es mi paz, el principal objetivo de esta guerra, 
Llevo por armas la pluma y un cuaderno roído
Que atestigua mi andadura en el camino

ESTAFA

Tu que socavas a la gente desde el insulto
Tu que destruyes la sonrisa con una mirada
Tu que finges ser humano siendo hiena
Estás hecho de abandono y dolor
Aprendiste a unir tus trozos con hilos de odio, con agujas de hielo
Para ti la fe es un pecado y el amor desolación
Apologista del caos y el desorden, vas as buscando socios a los que
hundir contigo a esa cueva oscura a la que llamas existencia                  
Tu cuerpo está hecho de gritos y abusos, imposible encontrar un trozo 

de paz en tus clavículas                                                                                    
No conoces el placer de la levedad, ni la felicidad de las pequeñas cosas.       
Esa vacuidad que arrastras es tu losa
Y esa falsa emancipación moral te queda grande.

Dar consejos no siendo sabio, es delito
Dar cobijo no siendo hogar, es pecado.
Ojalá cuando el ocaso te encuentre, hayas descansado  tus huesos  
al menos diez segundos en la paz que supone haber visto de frente  a la felicidad... 

VERANO

La pila de libros en la mesita de noche.
El olor a peras recién cogidas
El sol aterciopelando mi piel
Las gotas de agua que hacen autovías por mi cuerpo
Las noches azules
El eco de las voces de los niños a lo lejos
El canto de los pájaros que suena de noche y de día
El humo de las barbacoas, que es una proposición indecente a todas horas
Los poemas que quiero escribir y se me escapan de la mente y que nunca llegan al papel
Y esta estación maravillosa que perpetuaría hasta por las malas, y que tanto bien me hace...
Verano, hagamos un pacto tu y yo,   y seamos amantes perpetuos.