Hay un zaguán en la entrada
y baldosones en el suelo
hay flores que perfuman
y un damasco que es anhelo.
Hay adobe y cañizo
hay sopa y lagartijos
una puerta verde que se abre
y casi nunca es mi padre.
Hubo risas y hubo llantos
hubo pan y hubo cantos
pies descalzos que nacieron
y mil caminos anduvieron.
Hay un horno y hay pan dentro
hay un huerto en donde entro
hay un canto y es de un tero
es mi madre a nuestro encuentro.
Hay baldíos que limitan
y las nieves que no llegan
hay palabras que acarician
hay amores que calientan.
Una madre que camina
y sus pasos son comida
en una noche que no acaba
mis sueños se trenzaban.
Una pata de conejo
escondida en la pared
anunciaba buena suerte
casi siempre a su merced.
Hay un álamo plateado
hay un duende que se ve
hay un patio desolado
tierra yerma a granel.
Donde irán estos recuerdos?
quién los puede proteger?
una vida hecha de imágenes
condenada a desaparecer.
Perpetrar nuestra andadura
es difícil de creer, tantas horas
tanta historia, se podrían proteger?
Quizá estas palabritas, ayuden a tejer
una red red que atrape sueños
y los haga adormecer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario